El populismo es un tema que está llenando los anaqueles de las librerías y los estantes de las bibliotecas. Todos los días aparecen artículos en los periódicos: políticos, politólogos, historiadores, analistas o intelectuales públicos, todos tratan de explicar qué es el populismo, por qué ha resurgido y cuáles pueden ser sus consecuencias en el contexto en el que se encuentra el mundo hoy en día. Una buena fuente para comenzar a entender qué es el populismo, cuáles son sus implicaciones y qué es lo que está pasando en distintos países que han optado por regímenes populistas es La Démocratie dans l’Adversité (La Democracia en la Adversidad), publicada en francés, bajo la dirección de Chantal del Sol y Giulio de Ligio (Éditions du Cerf, 2019, 1038 pp.). En ella, Luis Barrón contribuye con el texto “Populismo, Democracia y Sentimientos Morales: el caso de México”.
Si bien el nacionalismo revolucionario había resultado en una especie de vacuna contra el populismo para México, la globalización, el agotamiento de la ideología de la Revolución y el hartazgo de los mexicanos con la corrupción y el pobre desempeño económico llevaron a los electores a votar por la opción de cambio que representó Andrés Manuel López Obrador en las pasadas elecciones federales del 1 de julio de 2018. ¿Se puede decir que, finalmente, México eligió el camino del populismo? ¿Qué significado podría tener esto? En “Populismo, Democracia y Sentimientos Morales”, propongo algunas hipótesis.
El texto puede leerse aquí (en francés).